El otro día hice un poco de orden entre mis cosas. Recoloqué algunos libros y cuadernos de las estanterías y vi que un papel roñoso asomaba a modo de marcapáginas en uno de ellos.
Lo cogí para tirarlo a la papelera y vi una letra escrita que no era la mía. Y recordé que se trataban de unas palabras que me leyó una amiga y que le pedí que me escribiera.
Dos frases breves que condensan la fórmula de la felicidad… lo que no evita que aparezca el sufrimiento, porque está ligado a ello…
Ser feliz es destinarse a la persona amada. El hombre es, cuando ama, dueño de su destino, porque se destina a quien quiere.
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Publicado por Elvira Lorenzo López
Tengo 32 años, y soy Licenciada en Filología Hispánica (con la especialidad de Lengua). Una de mis pasiones es la lectura: aprender todo lo que me muestra un libro, desde una cultura o época desconocida hasta formas de ser con las que tropiezo diariamente. Las páginas de un buen libro me ayudan a conocerme a mí misma, a los demás... creciendo en un autoconocimiento que es apoyo para enfrentarme a mis realidades y circunstancias; y fortaleciendo una empatía con personas que, quizá, de modo natural nunca me hubiera acercado... Mi segunda pasión: escribir. Lo que veo, lo que vivo, lo que siento, lo que oigo... Transformar las imágenes de un pensamiento en palabras que pueden ser reconocidas por otros, para vivirlas más intensamente.
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