Una coincidencia histórica, aunque comprobada en realidad posteriormente, provocó la estrecha vinculación entre dos autores diferentes: una muerte unió dos países distintos, con dos culturas diversas y unas vidas ajenas con sus propias experiencias. Sin embargo, ambos han escalado la cima de lo universal, superando límites de espacio y tiempo.
Se han adentrado de mil maneras en aquello donde toda la humanidad se encuentra: el ámbito de la intimidad humana, en la que la igual condición sobrepasa las diferencias. No siempre es necesario hablar del ser humano mediante dramas y tragedias. También la comedia muestra ese enorme mundo interior.
“Noche de reyes”. Albania, un naufragio desencadena una serie de acontecimientos inimaginables. Todo comienza con la separación de unos mellizos: Sebastián piensa que Viola ha muerto ahogada, y viceversa. Al llegar a tierra, Viola decide vestirse de hombre, y ambos se ponen a servir.
El amo de Viola, que ha adoptado el nombre de Cesario, le pide que transmita su declaración de amor a la condesa de Olivia, que guarda luto riguroso por su hermano. Ella le rechaza constantemente mientras que va despertando su corazón una inclinación apasionada hacia Cesario. A su vez, Cesario-Viola se enamora del duque Orsino, su dueño.
Entre situaciones cómicas y burlonas, risas y sorpresas, ocurre la gran confusión: toman a Sebastián por Cesario… Detonante de lo que sucederá al final…
